¿Final del camino?

Las palabras que son verdad no son bellas,
las palabras que son bellas no son verdad.
Quién es inteligente no discute.
Quién discute no es inteligente.

Quién es sabio no es erudito.
Quién es erudito no es sabio.
El sabio no acumula posesiones.
Cuanto más hace por los demás,
más tiene.
Cuanto más da a los demás,
más posee.
El Tao del cielo, consiste en favorecer,
y no perjudicar.
El Tao del sabio siempre obra sin luchar.

LXXXI Del Tao Te King

El giro pragmático-transcendental

En el post de ayer, señalaba la naturaleza trágica de la ética debido a que una vez impuesto el deber-ser la ética debe aniquilarse a sí misma. Su triunfo ocasiona necesariamente su suicidio. De ahí la imposibilidad del matrimonio de la Ética con la Utopía una vez realizada, solo podríamos ser libres "en potencia" que no "en acto".
Todas las éticas necesitan obligatoriamente de la libertad, ya que es el motor de cambio del Ser al Deber-Ser, sin embargo, hay filosofías que toman como única base esta misma y otras que se apoyan en una naturaleza "añadida". A estas últimas, pertenece la ética discursiva, una de las más populares en el mundillo filosófico actual.
Su máximo representante es Jürgen Habermas, aunque lo aquí comentado se apoyará en las tesis -hermanas- del filósofo K. Apel.

Esta ética se basa en el análisis pragmático-trascendental del lenguaje, es decir en un análisis de sus requisitos para que el lenguaje se muestre como instrumento de comunicación. Condiciones que hacen posible que se utilice el lenguaje por el indiviuo

Podríamos hacer antes que entrar en detalle las siguientes aseveraciones:

-El lenguaje es una realidad social que nace de la interrelación de los sujetos.

-El lenguaje es una de las características fundamentales de la humanidad. Todo lo que construimos está posibilitado por el lenguaje. Las condiciones que hacen posible el lenguaje hacen posible la humanidad.

-El lenguaje está orientado al entendimiento, sino quisieramos entendernos no hablaríamos (aquí ya parece vislumbrarse un brillo de ética)

La pregunta entonces es ¿Qué es lo que hace posible el entendimiento? Aquí aparece la situación comunicativa.

Alguien habla y pretende comunicar algo a otro, es lo que llamamos Oferta Comunicativa que podrá ser aceptada o rechazada. Debe cumplir cuatro requisitos para ser viable, estos requisitos son universales.

1. INTELIGIBILIDAD: En el sentido fonético, sintáctico y semántico del término.

2. VERACIDAD: Compromiso de decir la verdad sino queremos ser engañados y viceversa.

3. VERDAD: Los contenidos también deben ser verdaderos por el mismo motivo del requisito 2.

4. ADECUACIÓN Y CORRECCIÓN NORMATIVA: El ser humano cuando habla pretende adecuarse a lo que es bueno y verdadero.

Estas son condiciones éticas, por tanto, la razón se fundamenta en la ética porque la razón tiene una naturaleza moral. Según Apel, al tener la razón está naturaleza moral los acuerdos éticos que lleguemos a través de ella serán válidos siempre y cuando sean aceptados racionalmente por todos los miembros de la comunidad de interlocutores (humanidad).
Apel también reconoce que estos requisitos son ideales, es decir, que no siempre se dan aunque la intención de comunicarse, en esencia, se base en estos cuatro hechos sino no tendría sentido la comunicación.

Al lector dejo que se forme su opinión personal sobre este asunto. No me corresponde a mí sino a él, decidir si son ciertas o no las anteriores proposiciones.

La Naturaleza Trágica de la Ética

La ética es ante todo rebelión ante el estado actual de las cosas, una insurrección contra el Ser. Como dice Wittgenstein en Conferencia sobre Ética: “un intento de ir más allá del lenguaje”. Podríamos decir que el Diablo fue el primer moralista.

La tragedia de la ética precisamente se origina en su necesidad de ampararse en la metafísica, necesita una naturaleza humana. El último intento ha sido ampararse en la libertad, último baluarte ontológico todavía sin desmoronar. El problema es que el objetivo de la ética sería transformar el Deber-Ser en condición necesaria, es decir, en consecuencia ineludible del Ser, sin caída en la inmoralidad; pues que absurdo sería, propugnar una moral sin promover su triunfo. Y al desterrar del Deber-Ser a la inmoralidad, se líquida a la condición posibilitante de este. E igual que el Deber-Ser no permite la posibilidad de inmoralidad en su seno ¿Quién nos dice que el Ser la acepte también?

Bonus Track de "Todo el mundo es..." + Ganas de...

QUE HAGO AQUÍ

No sé si el mundo ha mentido
Yo he mentido
Yo no sé si el mundo ha conspirado contra el amor
Yo he conspirado contra el amor
El clima de tortura no constituye ningún consuelo
Yo he torturado
Aunque no hubiera existido la nube en forma de hongo
habría odiado
Escuchadme
Yo habría hecho las mismas cosas
aunque no existiera la muerte
Me niego a que se me sujete como a un borracho
bajo el frío grifo de los hechos
Yo rechazo la coartada universal

Como una cabina telefónica vacía junto a la que se pasa una noche
recordada
como los espejos del salón de un cine que tan sólo son consultados
al salir
como un ninfomaniaco que ata a un millar
en una extraña hermandad
Yo espero
a que cada uno de vosotros confiese


Texto de Leonard Cohen en Flores para Hitler, Editorial Visor Libros.

"Todo el mundo es importante pero nadie es imprescindible"

Hará unas semanas que me encontré a una antigua amiga del colegio y el instituto. En Resurrección III me referí a ella como N. Tres años antes perdí el contacto con esta persona debido al enfriamiento de la amistad que tuvimos como secuela de mi falsa "declaración de amor". El reencuentro fue en el autobús, hablamos superficialmente de nuestras vidas, intercambiamos nuevos teléfonos y messanger, en fín lo típico en estos casos...

La cuestión precisamente es que en el messanger encontré como lema suyo, la frase que he situado como título a este post. Me ha dado bastante que pensar. Sinceramente, no le he dado una interpretación personal (sería demasiado paranoico) pero desde una perspectiva general como reflexión ética -aunque de ética no tiene nada, he aquí la clave- me desagrada bastante. Me da algo de repelús, lo confieso.

El ser humano se define ante todo como posibilidad, como poder-ser desde una óptica existencialista y que considero -desde mi perspectiva personal- totalmente válida. Somos un proyecto abierto, difícilmente de encasillar y sobre todo, somos sujetos utilizadores, no objetos utilizables. Aunque la frase en sí no lo expone explicitamente, el término prescindir implica que el ser humano es excluído para lograr mis fines, por tanto, las personas pueden ser utilizadas para lograr mis intereses. Aquí ya se puede vislumbrar la objetualización del sujeto, paso definitivo para la desvalorización absoluta de la dignidad del individuo -ya que, desde esta óptica, lo mismo es una silla que un ser humano. Quizás sea un poco injusto, pero cuando intento imaginar la consideración que tiene de su vida esta chica, imagino que será como una partida de ajedrez en la que la gente de su alrededor representan las piezas. Tanto da ser amigo o enemigo, ya que al fin y al cabo y en último extremo, todos seríamos sacrificados para su supervivencia (Sospecha: en el fondo, reconozcámoslo, ¿Qué estaríamos dispuestos hacer si estuvieramos al filo del abismo? ¿Cómo juzgar?).

N. jamás será una criminal, probablemente, pero precisamente y paradójicamente esto es lo preocupante. Es una visión que esta socialmente generalizada y probablemente, tú y yo, querid@ lector/a, también la tengamos aunque no seamos conscientes de ello. Entre adolescentes ya se va extendiendo la metáfora transeunte=marciano de videojuego, el fenómeno antifreak -o risas cómplices ante lo que es diferente, ante la alteridad que nos podría ayudar a evolucionar- se convierte en legislación social de quién (o qué) se puede considerar enrollado y quien no, y el paradigma existencial del protagonista de American Psycho empieza a parecer el "fatum" de las sociedades globalizadas.

Y claro, ante la pérdida del valor inherente a la condición humana se forja el caldo de cultivo para la liberación de los instintos más destructivos del ser humano. En el tercer Reich, la propaganda nazi dejaba caer la sinonímia entre los conceptos judío-rata. En fín, prefiero no profetizar nada sobre todo por si me equivoco. Y una consideración final, tengo la impresión que para mejorar un poco las cosas quizás valga más la acción interior que la exterior, ver la viga en el ojo propio. Si cada uno de nosotros combatiera el mal en nuestra propia personal este dejaría de existir en el mundo.

El Arco de la Vida (Segunda Versión)

También tú tuviste grandes sueños, pero el amor
nos somete a todos a su ley y ahora las penas nos doblegan.
Pero no en vano el arco de la vida retorna
a su punto de partida.

¡Poco importa si subimos o bajamos! En la sagrada noche,
donde la Naturaleza sueña mudamente en días venideros,
y hasta en el más tortuoso de los infiernos,
siempre hay una ley justa, una justicia para todo.

Lo sé por experiencia. Pues nunca, dioses inmortales,
conservadores de la vida, nunca, que yo sepa,
me habéis guiado, como lo hacen los maestros mortales,
por fáciles senderos.

Que el hombre puebe todo -dicen los Celestiales-
y que, nutrido por una rica savia,
aprenda a dar gracias por todo, y comprenda
que tiene la libertad de buscarse un destino.

Texto de Friedrich Hölderlin